FACIOTERAPIA O REFLEXOLOGÍA FACIAL
La reflexología facial, al igual que el resto de técnicas reflejas, parte de la base de que el organismo es un gran holograma y todas sus partes aparecen reflejadas en lo que se llaman zonas espejo. Se pueden diagnosticar hipofunciones y elaborar tratamientos a través de las estimulación de esas zonas o puntos reflexología facial.
Según la facioterapia, se podría considerar la cara como un cuadro de mandos o un teclado del ordenador;
basta con apretar un botón para obtener una respuesta de un órgano, la regulación de una función orgánica o el alivio de un dolor.
La gimnasia facial y los masajes estimulan puntos de facioterapia, ayudando a requilibrar el organismo, activando la energía estancada y reforzando el efecto de rejuvenecimiento.
La cara, mucho más que el espejo del alma
El concepto holográfico del ser humano, base de la refloxología facial, considera que todo lo que somos está reflejado en nuestra cara como en un espejo, existiendo una relación sutil entre el órgano y su zona de correspondencia, en este caso un punto de la cara.
El principio de la facioterapia consiste en la estimulación de estas zonas reflejas, despertando la energía y ayudando a los órganos a restablecer su vitalidad y buen funcionamiento.
El origen de la enfermedad, el sistema nervioso
La facioterapia parte de la premisa de que muchas enfermedades tienen su origen en una fatiga del sistema nervioso. Por eso el principio básico consiste en conseguir una relajación.
Falta de sueño, agotamiento, estrés prolongado, actividad física insuficiente, tristeza, etc. Todos estos elementos tan familiares constituyen la base de la enfermedad y debilitan las defensas inmunitarias.
La enfermedad también puede surgir como consecuencia de un estancamiento de la energía, de ahí la importancia de mantener un buen nivel de energía en el cuerpo.
BENEFICIOS ESTÉTICOS
Muchos problemas estéticos tienen su origen en alteraciones funcionales de órganos vitales. Por ejemplo, las bolsas de los ojos se asocian a disfunciones renales; las manchas de la cara se pueden corresponder con una disfunción hepática; disfunciones hormonales se asociación con problemas estéticos en la zona de la barbilla; las arrugas a bloqueos y estancamientos energéticos, etc.
Bajo este prisma, la faciotaerapia es una potente herramienta para ayudar a tratar los problemas estéticos de la piel de una forma consistente y eficaz.
La facioterapia, al efecto que nos ocupa, produce un beneficio secundario nada despreciable. Practicada con regularidad, relaja la cara y mejora la circulación local con todos los beneficios estéticos que ello conlleva.